El uso de medios tecnológicos es común en la actualidad. Muchas de las actividades que desempeña el ser humano dependen hoy en día de herramientas digitales, que van desde correos electrónicos y mensajes de datos hasta juegos en línea, así como estructuras súper complejas para el manejo de empresas, bancos o entidades gubernamentales. Estas herramientas pueden llegar a ser tan útiles como peligrosas, ya que incluso pueden ser usadas para cometer ilícitos. Su peculiaridad es que rompen con el espacio físico, es decir, cada acto puede desarrollarse a kilómetros de distancia y con un solo clic.
Este preámbulo es esencial, ya que, aunque no lo parezca, estos actos dejan rastro, y su validez jurídica depende de la evidencia digital. En todo caso, este tipo de evidencia desempeña un papel fundamental a la hora de aplicar la ley. Cada vez son más los delitos que involucran el uso de la tecnología y los medios electrónicos. Esta evidencia hace referencia a cualquier tipo de información electrónica que puede utilizarse para demostrar la comisión de un acto o confirmar la inocencia de una persona durante la sustanciación de un proceso judicial.
El sistema procesal ecuatoriano busca mantenerse al día con los avances tecnológicos e innovar en la implementación de figuras jurídicas que permitan la reproducción de pruebas digitales. En este sentido, el Código Orgánico General de Procesos (COGEP) ha incorporado en sus artículos 193 y 194 reglas para la exhibición de contenido digital. Estas disposiciones establecen que, cuando se trata de documentos electrónicos, no es necesario materializarlos para que sean válidos; es decir, tienen validez en su forma digital.
De manera similar, el Código Orgánico Integral Penal (COIP) ha evolucionado, pasando de abordar únicamente la exhibición de documentos físicos a ampliar su alcance y consolidar reglas para la exhibición de contenido digital. Estas reglas son las siguientes:
- El contenido digital debe estar almacenado en cualquier medio óptico o sistema de almacenamiento, como CD, cintas, memoria flash (USB), entre otros.
- El contenido digital se reproducirá en su formato original mediante cualquier medio tecnológico, previa acreditación a través del testimonio del perito. Este testimonio dará cuenta de la cadena de custodia y autenticidad conforme a las técnicas forenses.
Los ejemplos más comunes de evidencia digital incluyen datos almacenados en dispositivos informáticos, registros de actividad en el navegador, correos electrónicos, archivos, entre otros.
Concepto y desafíos de la evidencia digital
Varios autores coinciden en que este concepto es difícil de encontrar y estandarizar, sin embargo, es necesario para entenderlo de la mejor forma posible. El Dr. Jeimy Cano, referente internacional en ciberseguridad define a la evidencia digital como aquella evidencia física que se encuentra construida por campos magnéticos y pulsos electrónicos que son recolectados y analizados con herramientas y técnicas especiales1. Mientras que Salud de Aguilar Gualda asegura que es “toda aquella información digital acreditativa de la realidad de un hecho afirmado por las partes y que resulta relevante para el objeto del proceso judicial”2.
Con estos conceptos básicos, podemos afirmar que la evidencia digital se refiere a cualquier tipo de información electrónica presentada en un proceso judicial para respaldar o refutar un argumento. Esta información abarca desde datos almacenados en servidores electrónicos hasta cualquier información generada, transmitida o almacenada en medios digitales. La importancia de la prueba digital es enorme, especialmente en casos relacionados con fraudes electrónicos, violaciones a la privacidad de datos, disputas sobre la propiedad intelectual, entre otros.
Existe la necesidad latente de que los países adapten su legislación adjetiva a las nuevas formas en que se presentan las pruebas. Hoy, aún se tiende a aplicar procedimientos propios de las pruebas físicas a las pruebas digitales, lo que puede atentar contra la seguridad jurídica. La presentación y admisibilidad de este tipo de evidencia debe ser cuidadoso, siempre garantizando su integridad, autenticidad y relevancia. En resumen, la evidencia digital es un componente crucial en el procedimiento judicial. Adicionalmente, los profesionales del derecho deben tener un profundo conocimiento de las técnicas y procedimientos para obtener, preservar y presentar la evidencia digital de forma efectiva en un entorno legal en constante evolución.
Si necesitas asesoría sobre este tema, no dudes en ponerte en contacto con uno de nuestros profesionales. Puedes escribirnos a ace@iurenovum.com o llamarnos al 0990938575 o 0990552880. Estaremos encantados de ayudarte.